martes, 31 de mayo de 2016

MI AVENTURA GRIEGA (FINAL)


    A la noche siguiente después de la cena dejamos las maletas en la puerta del camarote, pues desde Venecia cogíamos el vuelo de regreso a Madrid.

    Nos esperaba un último día en el barco navegando. Amparo y yo pensamos que una buena forma de pasar la mañana sería darnos un masaje, utilizando los servicios de Spa para relajarnos,  nos tumbaríamos  frente al mar en una sala luminosa y acristalada. Pasó la mañana casi sin darnos cuenta.

    Después de comer y tomar un aromático café volvimos al camarote a dormir  la siesta.

     A pesar del  maletón que había traído Amparo no le cabían sus cosas y a mi me sobraba espacio y kilos de equipaje. Uf...¡Qué jaleo! Mañana queda Venecia y algo compraremos. Salimos a dar una vuelta por cubierta para ver la animación de la gente, la inmensidad del mar y las estelas que deja el buque al navegar.

    Después de cenar fuimos al teatro nos esperaba una actuación espectacular la cual finalizó con un desfile de banderas y con nuestro himno. Era en homenaje por  haber ganado nuestra selección la Copa de Europa. Nos emocionamos y a su conclusión rompimos con fuertes aplausos.

 Ya llegó el día, atracamos en la laguna nos aproximamos en un ferry  muy cerquita del puente de los suspiros, a partir de ahí nos fuimos a recorrer los canales y subimos al emblemático puente Rialto. Encontramos una tiendecita escondida que surtía de gran cantidad de objetos a muy buen precio. Los pendientes en plata de máscaras y cristal de Murano, cuadros, máscaras de carnaval, etc.

    De pronto comenzó a llover nos refugiamos en los soportales de la Plaza de San Marcos, cada vez llovía con más intensidad y nos compramos unos paraguas  para acercarnos al buque pero el agua nos cubría por los tobillos. Venecia se inundaba y nosotras también. Menos mal que las fotografías las hicimos al comienzo de la visita, si no, no tendríamos ninguna. Nos quedamos sin tomar un café en uno de los muchos cafés que hay en la Plaza de San Marcos, lo bueno que nos ahorramos un buen dinero ¡Qué precios! están por las nubes, menos mal que los ponen al lado de la puerta…

    Con tanta agua  nos recogieron en el ferry para embarcarnos y aproximarnos al aeropuerto. Después de comer nos fuimos al aeropuerto a coger el avión que nos llevaría de regreso a Barajas. Pasamos la noche en Madrid por la mañana en Chamartín tomamos el tren para Alicante.
  Han pasado los años y su recuerdo permanece imborrable en mi memoria.









 
  ©  Todos los derechos reservados.

lunes, 30 de mayo de 2016

MI AVENTURA GRIEGA IV


    A penas dormimos  cuando a las siete de la mañana ya estábamos en el autobús para visitar la isla de Corfú.

  Su antiquísima historia se remonta a su colonización por los corintios, tras la guerra del Peloponeso pasó a dominio de los espartanos, más tarde  volvió a estar bajo los atenienses. Con Alejandro Magno pasó a pertenecer a los romanos del Imperio Bizantino.

    La isla a partir de la Edad Media estuvo conquistada por árabes, normandos, venecianos y por medio del Tratado de Campoformio pasó a dominio francés bajo el mandato de Napoleón I, después del Congreso de Viena, Corfú y el resto de las islas jónicas pasó a control inglés, que fueron devueltas a Grecia en mil ochocientos sesenta y cuatro.

    Tras la perorata de la guía para ponernos en antecedentes de las ciudades  tan llenas de historia que veríamos desde el autobús. Luego pasamos al palacio Achillion de la emperatriz Isabel de Austria- Hungría. Es un palacete sobrio  con una estatua de la emperatriz a tamaño natural, franqueando el acceso al palacio de verano, lo más bonito era el jardín muy grande presidiéndolo la escultura de Aquiles con la flecha  en el talón. Sissi era una apasionada del héroe. Con fuentes, bancos, bellas plantas y unas vistas panorámicas fantásticas al borde del escarpado acantilado. Musolini cambió el interior dejándolo bastante escueto de adornos no añadiendo nada que lo embelleciera.

    Después fuimos a un pueblo muy bello con calles empinadas llenas de comercios, ya me quedaban pocos detalles para llevar a la familia y aquí me pareció un buen lugar para comprar cosas diferentes. Paseando por la calle central ví unos frutos parecidos a los nísperos que aquí llaman quino y con el cual fabrican un delicioso licor. Toda la zona era agrícola con vides, olivos y grandes plantaciones de quinos éstos eran originarios de Japón.

    Compré una cestita de madera llena de frutos, un par de botellitas de licor con la forma de la isla y su mapa dibujado en tonos azules. Con ello completé mi lista de regalos para llevar.

    Ya se terminaba el tiempo de asueto y  compras nos volvimos al autobús para regresar al buque. Para empezar con la fantástica rutina de cada tarde-noche que poco a poco pronto iban a llegar a su fin.

    A la mañana siguiente nos esperaba una gran excursión a un bonito país con las cicatrices de una  guerra que no hacia mucho había terminado.

    Ya en el autobús de nuevo la guía comenzó según su costumbre a comentarnos un poco por encima la historia de Croacia y luego concretando la de la capital.   Preparadas con nuestra libreta tomábamos notas a vuela pluma con intención de ordenarlas al llegar Alicante. Teníamos mucha información los datos en nuestra mente se confundían, por eso apuntábamos todo lo posible lo que escuchamos a la guía. Eso sí que era una excelente idea y más cuando se es una entusiasta aficionada a la  historia Antigua y Medieval cómo  lo soy  yo.

       Disfrutaría doblemente primero in situ y después con los resúmenes de las notas que junto con la cantidad de fotografías hechas durante todas las excursiones  nos servían de apoyo a los datos históricos.

    La guía hizo un breve descanso para a continuación contarnos cómo a Dubrovnik (también llamada Ragusa) se la conocía con el sobre nombre de la perla del Adriático, está enclavada en la región de Dalmacia. Zona de grandes barbaries y de excelentes exponentes de las artes y las ciencias. Fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en mil novecientos setenta y nueve.

    Después se retrotrajo a la antigüedad diciendo que fue una ciudad ateniense hasta  la batalla de Kosovo, dando lugar a la firma un acuerdo de protección con los otomanos, a cambio pagaba un tributo al sultán que llevaban a Costantinopla. Los armadores tenían el privilegio e comerciar con Asia y África, Ragusa rivalizó con Pisa y Venecia en riqueza pero con Florencia en la cultura. Además Ragusa llegó a tener consulado en Sevilla.

    La ciudad fue independiente casi mil años e incluso ocupada la República de Ragusa conservó una gran autonomía gracias a sus habilidades diplomáticas. Hasta que las conquistas de Napoleón le llevó a la República de Ragusa que la abolió en un decreto de mil ochocientos ocho. El dominio francés solo duró unos cuatro años aproximadamente, aunque en ese tiempo construyeron una fortificación en la cima de la montaña y una larguísima carretera que aún subsisten. En mil ochocientos quince en el Congreso de Viena se abolió el imperio napoleónico y pasó a depender del imperio Austro-Húngaro.

 En la primera parte del siglo XX  pasó a dominio yugoslavo y donde Ragusa pasó oficialmente a llamarse Dubrovnik. En mil novecientos noventa y uno Yugoslavia se desmiembra, estallando la guerra y en ese mismo año proclaman por unanimidad a Croacia como país independiente. En abril del dos mil doce tenía prevista su incorporación a la Comunidad Económica Europea.

    Después de ésta lección de historia empezamos realmente a visitar los lugares más emblemáticos de la ciudad, tales cómo sus murallas con sus respectivas puertas, la catedral que por cierto se hallaban en pleno oficio de la Misa, ya que en su mayoría son católicos.

    Luego recorrimos las escalinatas de sus estrechas calles adornadas con flores al igual que en el barrio pesquero de Alicante, pero éstas con mucho empaque y señorío.  El gran mercado al aire libre cubiertos por unos toldos de diverso cromatismo. Todo el conjunto era una explosión  de olor y color que expelían sus frutos. En él se hallaban todo tipo de productos que constituían su alimentación sólida y líquida, por otra zona  del mercado encontrabas la ropa, los complementos, los bolsos con toda variedad de estilos y usos cualquier cosa que uno se pudiera imaginar. Entre tantos puestos nos deleitamos tanto por su gente cómo sus actitudes y vestimenta.

    Seguidamente nos perdimos entre las callejuelas escalonadas con sabor marinero para después acercarnos al puerto lleno de cruceros y de los barcos más lujosos.                                                               

 
                          Bajada de la red.



  
  ©  Todos los derechos reservados.
 


 

 

 

domingo, 29 de mayo de 2016

MI AVENTURA GRIEGA III


    A la mañana siguiente atracamos en la isla de Creta, más exactamente en su capital Heraclión. Como cada mañana nos esperaban los autobuses para hacer un recorrido por la isla. Lo primero que visitamos fue Querroseno con restos de las civilizaciones romana y bizantina, situados en un gran promontorio rodeado de bellos acantilado, se hallaban próximas al bello pueblo de Malia poseedor de un antiguo castillo y una hermosa playa de arena blanca.

    El camino de regreso estaba jalonado de artesanas haciendo los bordados clásicos de la zona. Exponían los manteles, sábanas y tapetes a su alrededor, sin embargo los hombres nos ofrecían los  trípticos e iconos ortodoxos helenos.

    Al llegar a Malia, nos encaminamos hacia el bar más próximo, en cuanto atravesamos el umbral fuimos directas a los lavabos. Nos refrescarnos la cabeza y nos mojamos la gorra para mantener baja la temperatura corporal.

   Se estaba tan fresco que nos sentamos un buen rato a degustar unos ricos granizados de naranjas. Volvimos al autobús para hacer un circuito por la isla hasta llegar a Heraclión.

    Una vez el centro de la ciudad iniciamos el recorrido hacia la fortaleza veneciana  bañada por el mar y las murallas que circundan la ciudad. Otros lugares de interés  que visitamos fueron: la iglesia de San  Marcos, el monasterio de San pedro y San Pablo ambos del siglo XIII.

 La Logia Veneciana que en la actualidad acoge el Ayuntamiento, la Candia veneciana que era famosa por el abastecimiento de agua a través de acueductos y las fuentes como las de Bombo, Morosini, Sagredo y Priuli. Todo ello pasó después de que desapareciera la civilización Minoica que fue el centro más importante de dicha civilización.

 Luego la bizantina y después los sarracenos que fueron expulsados de Al-Andalus construyeron un foso alrededor de la ciudad para su defensa, hasta ser masacrados por los griegos y su dominio duró doscientos cuarenta y tres años hasta que fue comprada por los venecianos.

     Nos decidimos  ir  al crucero para comer, ya que por primera vez se podía ir caminando y después volver a recorrer sus calles. Una vez saciado el apetito nos acercamos al camarote para aligerar nuestras mochilas y volver al casco antiguo de Heraclión. Sus calles estaban abigarradas por los comercios de todo tipo daba tiempo para entretenerse toda la tarde.

    Quería comprar un pequeño icono para mi dormitorio pero uno específico que me gustó al bajar del castillo de Cnosos. Lo busqué por cada tienda hasta que lo encontré.

 Comencé el regateo con mi ínfimo inglés pero al final  conseguí  un buen precio. Ella no se atrevió a regatear y se quedó sin él. Continuamos paseando admirando su arquitectura  más vulgar, los escaparates de las grandes y pequeñas joyerías, las de objetos de recuerdo.

 Entramos en un comercio muy curioso por la cantidad tan variada de productos, allí Amparo se hizo con un bonito sombrero, pues no se acordó de meter una gorra en la maleta.

    Ya estaba mediada la tarde el cansancio empezaba hacer mella en nosotras, pero ella no quería volver al barco así que compré un helado para degustar de regreso por el paseo hasta el buque, dejándola que siguiera disfrutando de los últimos momentos de Heraclión.

    Fui directa al camarote a darme una refrescante ducha y descansar un momento, el momento debió ser largo pues me desperté con su llegada. Mientras se duchaba yo me iba espabilando y pensaba… ¿qué me pongo?.. El dilema de toda mujer. Siempre llevamos más indumentaria de la que necesitamos, es el clásico por si acaso…

    Ya nos habíamos engalanado más que de costumbre con los vestidos largos de gala y arregladas de peluquería pues era la cena con el capitán. Antes fuimos a cubierta para ver por última vez  a Heraclión. Mientras nos alejábamos en el crucero su fortaleza destacaba cómo una bella isla con las tonalidades del atardecer, luego nos dirigimos a las salas de música y baile antes de ir a la gran cena.

    Entre los flases del fotógrafo haciéndonos las correspondientes fotos con el capitán para después darnos paso al embellecido comedor. Con una pantagruélica cena y unos deliciosos postres mediterráneos, y cómo colofón nos obsequiaron con unas bellas melodías. La fiesta continuaría en cubierta hasta  altas horas de la madrugada.
 
 
Pintura de M. Morrison
                                      
 

  ©  Todos los derechos reservados.
                                                                                                                                               

viernes, 27 de mayo de 2016

MI AVENTURA GRIEGA II


    Estábamos atracados en Mikonos  cambiamos el autobús por una embarcación que nos llevaría  a la isla de Delos en el centro del archipiélago de las Cícladas.

    En la antigüedad Delos era un importante santuario donde la mitología coloca a Apolo y Artemisa. La isla era un centro de culto y ferias, las cuales se denominaban Delias. Cómo sus habitantes no eran autosuficientes  importaban todo lo necesario, ello dio lugar a un gran puerto comercial que los romanos conquistaron para hacer la competencia a Rodas. Se conserva una fuente minoica, varios restos de plazas de mercado, el templo  dedicado Apolo, la terraza de los leones de los que solo quedan siete, el  templo a Dioniso,  de Hera y la Casa de los Delfines.

    El calor era asfixiante en la isla solo había una cafetería que dejamos sin existencias. Nos avisaron de la salida de la embarcación ya que el mar se estaba agitando mucho, cuando ya habíamos navegado la mitad del trayecto a lo lejos vimos una pareja que hacía aspavientos para que les esperásemos, las protestas no se hicieron de rogar. Los improperios se oían por todos los rincones del barco y el agua inundaba la primera planta de la embarcación con los embates de las olas.
El patrón dio media vuelta para recoger a la despistada pareja, cuando estuvieron a bordo escucharon lo que debían y lo que no. Lo que nos sacó de quicio fue cuando nos comunicaron que la excursión por Mykonos se suspendía por el retraso sufrido. Solo nos hicimos una foto mientras nos dirigíamos al buque para tener una demostración de haber pisado Mykonos.

    Con la rutina de las tardes en los cruceros los baños en las piscinas, el entretenimiento social programado, los ratos en la biblioteca o en recoletos cafés con música suave y con un buffet para tomar algún piscolabis. Así se pasaba el tiempo hasta la hora de la cena, después acudíamos al teatro más tarde a la discoteca o a contemplar el universo en cubierta.

    A las siete de la mañana atracamos en un pequeño puerto de Santorini, nombre de origen italiano que recuerda el dominio de la república veneciana. Conquistada  de nuevo por los griegos  la llamaron Thera. Actualmente pertenece a Grecia dentro del archipiélago de las Cícladas en el mar Egeo. La actual Santorini está formada de los restos de una erupción volcánica que destruyó gran parte de su territorio. Dando lugar a una gran caldera geológica  el mar engulló su antigua e importante civilización  Minoica. Su capital Fira, cuelga desde  lo alto de un acantilado que desciende hasta la boca del volcán ahora cubierto por el mar.

    Subidos al autobús hicimos un recorrido por la isla hasta llegar a la población de Oia, coqueta y volcánica, sus habitantes reutilizan la piedra para fabricar accesorios femeninos y también objetos decorativos. Muchos trocitos los embolsan para venderlos, son las conocidas piedras pómez españolas de nuestro Teide.

    Aquí me surtí de regalos originales. Las hermosas panorámicas desde el acantilado empezamos a fotografiar lo más interesante de Oia.

    De nuevo al autobús  camino de Fira. El calor más acuciante que en España no dejábamos de hidratarnos por dentro y  por fuera mojando la cabeza y la gorra para mantenernos frescas el mayor tiempo posible. Su arquitectura de líneas en su mayor parte redondeadas, los colores blancos y azules típicos del Mediterráneo le daba una belleza especial. Sus estrechas calles llenas de comercios en los que dominaban las joyerías, al pasar por una de ellas se escuchaba  música clásica, que reconocí al momento por ser una de las piezas que oía en casa.
Ello me indujo a entrar para observar las joyas tan bonitas  de plata  unas talladas y otras grabadas con sus característicos edificios, los anillos con sus formas especiales parecían que  puestos en los dedos formasen un todo. Amparo se lo compró de forma escultórica y yo la grabada.

    Cansadas por el inmenso calor y las cuestas interminables de sus calles decidimos tomar el funicular que nos bajaría por el acantilado hasta la cercanía del buque. Otros recorrían la distancia montando en burro y los más deportistas bajaban andando.

    Una vez en el barco nos fuimos al camarote que compartíamos tomamos unas duchas, descansamos unos minutos hasta la hora de comer.

    El buffet estaba muy completo con toda clase de platos mediterráneos los arroces, las pastas, los pescados, las carnes junto con las ensaladas nos abría tanto el apetito que comíamos demasiado, seguro que al finalizar el crucero nuestro peso corporal habrá aumentado por lo menos en un par de kilos.

    Por la tarde nos reunimos para participar en los juegos de cubierta para más tarde darnos un bañito en la piscina. Mucha y variada diversión para disfrutar de toda una tarde embarcados. Las tiendas con variados productos desde ropa, bisutería, complementos, joyería y todo lo relacionado con la fotografía e imagen. Se abrían a los pasajeros cuando el barco se hallaba en alta mar, porque los precios eran más económicos que en los lugares turísticos. Después de tanta distracción y muy cansadas regresamos al barco.
 
 
©  Todos los derechos reservados.
                                                                                                                                
     


martes, 24 de mayo de 2016

MI AVENTURA GRIEGA


    Durante el final de la primavera Marisa organizó un crucero por el Mediterráneo Oriental, el Adriático y un poquito del Egeo. Era una tentación irrefrenable para quien durante gran parte de su vida soñó con hacer ese viaje. Conocer la cuna de la cultura, la ciencia y la Democracia, pilares hoy de la Europa Occidental. Pisar los lugares por donde Platón, Aristóteles, Tales de Mileto, Homero, Hipócrates, Safo entre otros anduvieron. Su Mitología nos ha llegado hasta hoy permaneciendo en el firmamento.

 Formábamos un grupito muy heterogéneo, había algunos que nos eran desconocidos, y  no se asemejaba ni remotamente al tipo de gente que solíamos reunirnos para otras excursiones, vamos que no encajaban…

    Llegó el día de partir hacia Madrid.  Montamos en el tren que nos llevaría a la estación de Chamartín, allí nos esperaba un microbús para acercarnos al aeropuerto de Barajas (Adolfo Suárez). Mientras esperábamos la hora de embarcar, tomamos unos bocadillos en la cafetería y  nos dirigimos hacia el mostrador correspondiente a facturar las maletas ¡y qué maletas!... ¡Dios mío qué grandes!...sí solo era una semana…

    Era la primera vez que subía a un avión pero no estaba nerviosa, solo curiosa por las nuevas sensaciones a experimentar. Se hizo de noche durante el vuelo, según  nos acercábamos a Atenas, el capitán nos aconsejaba mirar por las ventanas y ver el gran espectáculo de la Acrópolis iluminada. ¡Fascinante!..., a pesar de los años que

 han pasado, todavía guardo fresca en mi retina aquella maravillosa imagen, ante sala de la cantidad ingente de restos arqueológicos que nos asombrarían. Desembarcamos y el aeropuerto era minúsculo comparado con el de Barajas. Enseguida recogimos el equipaje y nos llevaron hacia el puerto de El Pireo.

    A principios de julio y a las siete de la mañana…, y  ¡hacia calor! Con ropa fresca, calzando unas playeras, y una gorra protegiéndonos del sol. Metimos en la mochila la máquina de fotos, pañuelos de papel, unos bollos, fruta, agua y la cartera. Nos dirigimos con nuestro grupo al autobús asignado. Desde el primer momento Amparo y yo nos sentamos juntas, por desconocer al resto del grupo.

    Llenas de entusiasmo por visitar la Acrópolis no parábamos de hacer comentarios sobre ella, hasta que la guía turística tomó el micrófono para ponernos en antecedentes de la visita.

    La entrada se inicia por una gran puerta llamada los Propileos, a su lado derecho se halla el templo de Atenea Niké con una gran estatua de bronce de Atenea, esta fue realizada por Fidias.

   A la derecha de donde se encontraba la escultura se hallaba el Partenón,  al final está el Erectión, con su stoa sostenida por seis cariátides. En la ladera sur se encuentran los restos de otros edificios, el teatro al aire libre de Dioniso, donde estrenaron sus obras Sófocles, Aristófanes y Esquilo. La mayoría de los templos fueron reconstruidos bajo el mandato de Pericles. Sobre el terreno la guía nos mostraba los dibujos en unas láminas especiales, en las que veíamos cómo eran los edificios en su esplendor.

    Anduvimos con cuidado por toda la Acrópolis, ya que el Partenón se hallaba en plena restauración, porque durante la guerra se utilizó como polvorín y  explosionó quedando derrumbado.

    Cómo tengo por costumbre en mis excursiones hice fotografías de éste magnífico e histórico lugar para mantener vivo su recuerdo.

    Después bajamos a la ciudad de Atenas a probar sus exquisiteces culinarias, pero  nos adentramos por el centro de la capital para callejear y conocer sus edificios e iglesias ortodoxas.

 Andando, andando topamos con el mercado al aire libre de frutas y verduras, el color llamativo y su frescura, nos hizo comprar gran cantidad de unas deliciosas cerezas que nos refrescaban  a la vez nos sirvió de comida. Saboreando la fruta dimos de bruces con las típicas tiendas para turistas, en ellas adquirimos algunos detalles para parte de la familia y poca cosa para nosotras esto solo era el principio del viaje. Luego fuimos al punto de encuentro para subir al autobús desde donde nos enseñarían una vista general de la ciudad.

 Hicimos una parada en el museo Arqueológico y después otra en lugar donde se celebraron los Juegos Olímpicos modernos, en que se conmemoraba los siglos de su instauración en la antigüedad.

    Atenas como ciudad moderna deja mucho que desear, más bien fea, no encuentro un adjetivo que la califique mejor. Con el deseo que con el paso el tiempo en la ciudad se obre el milagro de mejorar su aspecto, iniciamos el regreso al barco. La experiencia del crucero anterior me sirvió de referencia para elegir los lugares del buque que más me divertirían, pero no contaba con las vueltas que dábamos para encontrar las salas, era tan grande el barco que en subir y bajar e ir hacia un lado y otro se nos iba un buen rato ¡cosas del crucero!
   
 
  ©  Todos los derechos reservados.
 
 
 
 
 

domingo, 22 de mayo de 2016

LUIGI BOCCHERINI

 Nació en (Lucca, actual Italia, 1743 - Madrid, 1805) Compositor y violoncelista italiano. Dentro del período clásico, Luigi Boccherini es siempre el gran olvidado. Formado en su ciudad natal como violoncelista,  en 1768 se trasladó a París, donde recibió la oferta de entrar al servicio de la corte española como músico de cámara del infante don Luis. Sus obras más célebres, como las basadas en motivos españoles, y en especial el Quintettino Op. 30 n.º 6 «La musica notturna di Madrid» (1780) o el Quinteto de cuerda Op. 50 n.º 2 «Del Fandango» (1788). Durante sus últimos años hubo de ver cómo su música y su persona caían en el olvido. Autor prolífico, se le deben un Stabat Mater (1781), veintiséis sinfonías, entre las que destaca la subtitulada La casa del diablo, ciento quince quintetos y ciento dos cuartetos.
Habiendo regresado a Luces, estrechó amistad con el violinista Filippo Manfredi y emprendió con él una afortunadísima gira artística que duró varios años. En 1768 llegó a París, donde obtuvo calurosa acogida y donde publicó sus primeros tríos y cuartetos.
En 1769, siempre con Manfredi, se trasladó a Madrid, invitado por el embajador de España en París: allí obtuvo el calificativo de "compositor y virtuoso de cámara" del infante don Luis, hermano del rey. En 1797 escribió música solamente para Federico Guillermo de Prusia, que le había conferido el título de compositor de cámara con una pensión anual. Muerto Federico Guillermo en 1797, Boccherini perdió la pensión y su situación económica empeoró rápidamente. Durante un breve período, de 1799 a 1802, gozó de nuevo de una cierta prosperidad gracias a la generosa protección de Luciano Bonaparte, al que había dedicado algunas de sus obras; pero después que el embajador francés hubo de abandonar Madrid, perdió este último apoyo y pasó los últimos años de su vida en estado de indigencia. Sus restos fueron sepultados en la iglesia de San Justo de Madrid; transportados a Lucca en 1927, se conservan en la iglesia de San Francisco.

jueves, 19 de mayo de 2016

ARTEMISIA GENTILESCHI



Nació  en Roma en 1587, fue la hija mayor del pintor Orazio Gentileschi uno de los principales representantes de la escuela de Caravaggio. Aprendió todo lo esencial en el taller de su padre después fue a estudiar con Caravaggio. A los diecisiete años firma su primera obra aunque muchos creen que estuvo ayudada por su padre. A los diecinueve años como el acceso a las academias profesionales solo eran masculinas, su padre le puso un preceptor llamado Agostino Tassi, mientras su padre estaba trabajando en Roma. Durante ese tiempo la violó, al principio le prometió salvar su reputación casándose con ella. Más tarde renegó de ella pues ya estaba casado. Orazio lo denunció ante un tribunal papal durante la instrucción que duró siete meses se descubrió que cometió incesto con su cuñada y que había planeado matar a su esposa. Del proceso se conserva bastante documentación de entre ella destaca la crudeza del relato de Artemisa:

Cerró la habitación con llave y una vez cerrada me lanzó sobre un lado de la cama dándome con una mano en el pecho, me metió una rodilla entre los muslos para que no pudiera cerrarlos, y alzándome las ropas, que le costó mucho hacerlo, me metió una mano con un pañuelo en la garganta y boca para que no pudiera gritar y habiendo hecho esto metió las dos rodillas entre mis piernas y apuntando con su miembro a mi naturaleza comenzó a empujar y lo metió dentro. Y le arañé la cara y le tiré de los pelos y antes de que pusiera dentro de mi el miembro, se lo agarré y le arranqué un trozo de carne.

 

Eva Menzio (editora), Artemisia Gentileschi, Lettere precedute da Atti di un processo di stupro, Milán, 2004

Artemisia fue sometida a un humillante examen ginecológico y torturada usando un instrumento que apretaba progresivamente cuerdas en torno a los dedos — una tortura particularmente cruel para un pintor-. De esta manera se pretendía verificar la veracidad de sus acusaciones, pues se creía que si una persona dice lo mismo bajo tortura que sin ella, la historia debe ser cierta. Tassi fue condenado a un año de prisión y al exilio de los Estados Pontificios.

JUDIT decapitando a HOLOFERNES, MARÍA MAGDALENA. Galería degli Uffissi

Artemisia y su marido se instalaron en Florencia  allí, Artemisia disfrutó de un gran éxito. Fue la primera mujer en ingresar en la Academia del Dibujo de Florencia, se convirtió en una exitosa pintora de corte. Mantuvo buenas relaciones con los artistas más respetados de su tiempo, como Cristofano Allori y fue capaz de conquistar los favores y la protección de personas influyentes, comenzando por el gran duque Cosme II de Médici.

Entre sus admiradores se hallan Buonarroti el joven (sobrino del gran Miguel Ángel. a menudo el que le encargaba cuadros debía desear tener una imagen que le recordase visualmente a la autora, cuya fama iba creciendo. Su éxito y la fascinación que emanaba de su figura, alimentaron, a lo largo de toda su existencia, rumores sobre su vida privada.

Murió en Nápoles acompañada de su hija.





.

miércoles, 18 de mayo de 2016

EL SEGADOR Y DOÑA JUANA


La emperadora de Roma es una hija bizarra,

 que la quieren meter monja y ella quiere ser casada.

 La pretenden siete duques y a todos los despreciaba,

 a unos era por el oro, a otros era por la plata

 y a otros les falta valor para empuñar bien las armas.

 Una mañana de agosto, se ha asomado a la ventana

 y ha visto a tres segadores segando trigo y cebada.

La enamorado el del medio porque su arte labraba,

 segaba con oz de oro, la empuñadura de plata.

Ya le ha mandado llamar con una de sus criadas.

 -Corra, corra segador que le llama doña Juana.

 -Buenas tardes segador. -Buenas tardes sean dadas,

 que se le ofrece señora que tan deprisa me llama.

-Usted como segador, segador de honra y fama,

 usted como segador, quiere segar mi senara.

-Esa senara de usted no está para yo segarla,

 es para condes y reyes caballeros de gran fama.

 -Mi senara no está en valle, ni tampoco en tierra llana,

 esta en un vallico oscuro debajo de mis enaguas.

 Mi senara es para usted...

si usted se atreve a segarla;

ni tié cardos ni garduñas

ni cosa que daño le haga.

Ya le prepara la cena,

ya le prepara la cama,

y a eso de la media noche

le pregunta doña Juana:

-¿Qué tal vamos, segador,

que tal vamos de senara?

De senara vamos bien,

llevamos diez manos dadas.

Y doña Juana le dice:

-yo con veinte, no me bastan.

-Me voy que ya viene el día,

me voy que ya viene el alba,

y dirán mis compañeros:

 ¡aquel hombre cuanto tarda!

A eso de los nueve meses

la potrilla relinchaba.

Y aquí se acaba la historia

del segador y doña Juana.

 

martes, 17 de mayo de 2016

JARDÍN VALENCIANO


Es el principal espacio verde en un área residencial  situado en la zona noroeste de la ciudad de Valencia. De momento en España es el último jardín basado en el libro “El sueño de Polifilo” escrito por Francesco de Colonna en el sigloXVI  donde se quiere ver misterio y esoterismo.

En éste se ubican tres plazas: una en la entrada principal, otra en la intersección de los ejes menores denominada la plaza del cubo y una tercera en el cruce de dos paseos con un gran estanque y en el centro la isla Citerea.

El estanque tiene una función ornamental  del agua  salen naranjos en alcorques y en el centro una isla que hay un lugar cubierto por una pérgola de rosales y clemátides a la que se llega por medio de dos pasarelas.

Las entradas laterales potencian una interacción directa entre el jardín y las viviendas existentes entorno al mismo. Un lugar encantador digno de disfrutar.